Iniciando la década del 90, existía un grupo de coleccionistas que se reunían para compartir su pasión por la salsa y realizaban distintas actividades de una manera muy espontánea en algunas zonas de la ciudad, especialmente en las Salsotecas.
De esta manera, en el año 1991 surgió el primer encuentro y se le conocía como ‘Encuentro de discómanos y salsotecas’. En un principio el evento se realizaba en el Parque de las Banderas y asistían alrededor de 500 personas.
Con el pasar del tiempo se fueron uniendo más coleccionistas y por medio de una solicitud del maestro Gary Domínguez se hizo el primer encuentro dentro del marco de la Feria de Cali.
El encuentro se fue ganando un espacio y especialmente el culto de aquellos que saben que en los discos está la esencia de las raíces de todo un pueblo que ha crecido en los barrios Obrero, San Nicolás, Alameda, entre otros, rindiéndole culto a todos aquellos que han escrito páginas llenas de pentagramas y sones de este género musical salsero.
Además, la primera convocatoria oficial tuvo grandes resultados gracias al voz a voz de los participantes. Aproximadamente, 1 000 personas se acercaron a la carpa de este evento que, para ese entonces, solo contaba con dos tornamesas y mucha pasión por la música latina y afrocaribeña.
Caleños y turistas han sido testigos de la transformación que ha experimentado esta gran celebración, pues a lo largo de su trayectoria se ha constituido como uno de los principales atractivos de la Feria de Cali que, sin duda alguna, reúne un legado histórico que hace parte de la identidad de la ciudad.
Ana María Larrea Zambrano
Comunicaciones Corfecali